Es imprescindible que la página web de una empresa cuente con un diseño optimizado y bien estructurado para mejorar la navegación de los usuarios y potenciar la conversión.
Los elementos esenciales para que esto se cumpla son los siguientes:
Rapidez de la carga
Los usuarios cada vez tienen menos paciencia. Se estima que no esperan más de 2-3 segundos para ingresar a un sitio web y ese es el tiempo que Google valora para posicionar sitios web.
Por esta razón necesitas que tu diseño web asegure una carga rápida. Para eso, deben comprimirse los archivos y cuidar el peso y la cantidad de imágenes y videos que incluyes.
Facilidad de uso
La facilidad de uso o usabilidad consiste en que cualquier usuario que quiera acceder y navegar por tu web lo haga de la mejor forma posible. Es decir, de forma intuitiva, sencilla, rápida y sin fricciones.
Una web con una buena usabilidad es aquella en la que un usuario entra con un objetivo -por ejemplo, suscribirse a un servicio- y puede hacerlo en pocos pasos, sin necesidad de retroceder y sin confusiones en el proceso.
Asegurar esto hará que los usuarios estén más satisfechos y reducirá el porcentaje de abandonos de la página web.
Homogeneidad
Otro punto a tener en cuenta es la estética de tu web: Internet es un lugar muy visual. Los perfiles de social media y sitios web que más cuidan su aspecto son los que más confianza generan a los usuarios.
Por eso, mantener una misma línea en cuanto a los colores, tipografía, estructura, fondos y elementos es fundamental.
El diseño web debe ser coherente, atractivo y sorprender el usuario sin olvidar su usabilidad y practicidad.
Legibilidad y escaneabilidad
Con respecto a los textos que incluyas en tu web, debes seguir una serie de recomendaciones:
- Primero que nada, no abusar del texto. Comunicar lo justo y necesario y no excederse
- Hacer más legible el contenido: no usar oraciones ni párrafos muy largos, organizar el contenido en listas o bullet points
- Favorecer la escaneabilidad: los usuarios ya no leen, escanean el contenido en busca de lo que más les interesa. Para favorecer esto (y que no salgan frustrados de tu web) debes tener bien organizado el texto, con subtítulos y espacios entre cada bloque de texto
Responsividad
Uno de los aspectos más considerados por Google, además de la velocidad, es la responsividad.
¿Qué es el diseño web responsive? Aquel en el que el contenido de un sitio web se amolda al tamaño de cualquier dispositivo desde el que se acceda, sea un ordenador, tablet, móvil, etc.
Dado que la mayoría de los accesos a Internet se dan desde móviles, hace un par de años que Google lanzó Mobile First, una nueva disposición de su algoritmo que prioriza los diseños web responsivos y penaliza a las webs que no lo tienen.
Por eso, asegúrate de que tu diseño web sea responsive.